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SANTO DOMINGO.- El director del Departamento de Protección Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente, Manuel Antonio Vásquez Tineo, aseguró que el 70 por ciento de lasdenuncias que recibe ese departamento corresponden a los altos ruidos que se originan en los colmadones, por la música y las plantas eléctricas de esos y otros negocios.

Dijo que de cada 10 denuncias que reciben 4 tienen que ver con los colmadones y 6 con las plantas eléctricas que utilizan esos y otros negocios, debido a los constantes y largos apagones.

Manifestó que las emisiones de ruidos máximos permisibles rondan entre 55 a 60 decibeles en el horario diurno o sea de 7:00 de la mañana a 9:00 de la noche, mientras que en el nocturno, que abarca desde la 9:00 de la noche hasta las 7:00 de la mañana, debe ser de 50 a 55 decibeles.

Explicó que los decibeles son la unidad de medida del sonido, la que es determinada con un aparato llamado Sonómetro.

El funcionario reveló que los ciudadanos establecen colmadones sin pedir permiso a nadie, tras señalar que muchos de ellos se apoderan de las aceras y hasta parte de las calles, lo que constituye una violación a la Constitución.

Sobre el impacto ambiental, Vásquez Tineo reconoció que los colmadones afectan negativamente tanto a los seres humanos como al ecosistema, ya que aparte del impacto auditivo las plantas eléctricas dañan el aire puro, lo que perjudicaría los pulmones.

“Lo que llamamos impacto ambiental, cuando hablamos de ruidos, es la afectación que produce ese efecto sobre la salud de las personas, porque no solamente sobre el oído, sino sobre la calidad de las personas, sobre el derecho que tienen a dormir bien y a descansar tranquilamente sin la perturbación de ese sonido, lo que se traduce a la calidad de vida”, agregó el funcionario perteneciente a la subsecretaría de Gestión Ambiental.