SANTO DOMINGO.- Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez manifestó ayer que el país necesita de mucha oración por tantas personas que han sido inmoladas fruto de la violencia de bandas de antisociales que actúan al margen de la ley y dijo que bajo ninguna circunstancia pueden justificar esas acciones por la pobreza o la falta de empleo.
Asimismo, al encabezar una eucaristía con motivo de Corpus Christi, celebrada en el estadio Quisqueya, que estuvo repleto de feligreses, López Rodríguez reiteró que se opone a la pena de muerte en el país, incluso contra los criminales, porque solo Dios puede disponer de la vida de los demás.
“Que sepan los pordioseros de amor que están matando gentes que el pueblo no acepta su conducta”, refirió López Rodríguez al tiempo que reiteró que la única forma de erradicar la violencia es con paz en el corazón, conciencia familiar y paz en el mundo.
Dijo que el país necesita de mucha oración y que se ofrezcan sacrificios como en los tiempos antiguos, que se hacían sacrificios personales y las personas ofrecían alimentos y cosas placenteras como ofrenda al señor Jesús para que Dios renueve la fe cristiana.
Llamó a las más de 200 parroquias a continuar con el Plan Pastoral con la frase “te conocimos Señor al partir el pan.
A la eucaristía concelebrada por los obispos auxiliares asistió la primera dama Margarita Cedeño de Fernández, la secretaria de la Mujer, Gladys Gutiérrez, y el secretario de Deportes, Jay Payano, entre otras autoridades civiles.
El estadio Quisqueya estuvo lleno a toda capacidad, incluyendo el terreno de juego, los miles de religiosos llevaron sombrillas y paraguas, ya que aunque el cielo estaba medio nublado amenazaba con llover, pero finalmente los rayos del sol cayeron sobre el lugar, pese a lo cual la gente cantaba y aplaudía al ritmo de los cánticos religiosos.
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