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Una turbonada con fuertes lluvias azotó ayer varias comunidades del Cibao, con un saldo de numerosas viviendas y vehículos anegados, así como árboles, semáforos y cables del tendido eléctrico derribados.

Las aguas acumuladas en diferentes vías de la ciudad provocaron un gran caos en el tránsito y serios daños a la agricultura.

Aunque se dijo que un niño había muerto en el sector El Congo de esta ciudad, el director de la Defensa Civil, Francisco Arias, dijo que todavía anoche rastreaban el lugar para confirmar la versión.

En el hospital regional José María Cabral y Báez, el agua volvió a afectar la primera planta, donde son guardados medicamentos y alimentos.

Mientras, en sectores de clase media como Los Jardines y Reparto Oquet, varias casas quedaron bajo agua, y en la carretera La Herradura la caída de un techo de zinc ocasionó daños a varios vehículos en una agencia.

En la avenida Las Carreras un letrero inmenso destruyó parte de una verja y provocó caída de un semáforo, lo que ocasionó pánico y un gran caos en el tránsito vehicular.

Una situación dramática vivieron decenas de familias que residen a orillas de la cañada del Hoyo de Julia, donde la crecida y los fuertes vientos afectaron decenas de casas, cuyos habitantes tuvieron que abandonarlas y ser socorridos por brigadistas de la Defensa Civil, mientras otros decidieron subir a los techos para evitar ser arrastrados por las aguas.

Representantes de juntas de vecinos reclamaron la ayuda urgente de las autoridades y según Ercilia Polanco, residente en El Ensueño, el problema se agravó debido al pobre desempeño de las autoridades municipales.

Otros sectores afectados fueron Pueblo Nuevo, Las Cayenas, La Muñeca y El Congo, donde además de inundadas, varias casas quedaron sin techos, ya que fueron levantados por los vientos.

Muchos residentes luchaban por rescatar algunos enseres domésticos de sus viviendas anegadas. Las inundaciones en algunos barrios era tan elevada, debido a los torrenciales aguaceros, que llegaban hasta un nivel superior a las ventanas, por lo que muchas camas, muebles y electromésticos quedaron bajo las aguas al no poder ser rápidamente transportados hasta lugares más altos y seguros en los vecindarios contiguos.

Las brigadas de auxilio y rescate fueron vistas principalmente en las calles donde la caída de paredes y árboles causaban obstrucciones al tránsito.

Sin embargo, en los barrios muchos de los residentes habían tenido que asumir sus propias tareas de protección frente al fenómeno atmosférico ante la ausencia de socorristas.

Las lluvias que se registran en diferentes regiones del país se deben a un amplio campo nuboso que continuará teniendo incidencia en la actividad climática en las próximas horas.

De acuerdo a informes de la Oficina de Meteorología, una vaguada y los remanentes nubosos que dejó una onda tropical mantienen una situación de inestabilidad en el clima.

Meteorología dijo que los análisis termodinámicos indican que durante el fin de semana las condiciones del tiempo permanecerán favorables