 Autoridades locales buscan a criminales haitianos que habrían cruzado la frontera para evitar la persecución judicial por la comisión de crímenes de estado durante el régimen de Aristide, y que se presume cuentan con protección que ha impedido su captura. Los perseguidos forman parte de una lista remitida por la Policía haitiana a los organismos de seguridad que, aunque se elaboró hace doce meses, incluye a delincuentes que han vuelto a cometer crímenes este año. La información, suministrada por el Departamento de Asuntos Haitianos de la Dirección Nacional de Inteligencia, da cuenta de que se busca a acusados de secuestro, narcotráfico, y actos de barbarie. “Muchas de esas personas se escondieron aquí tras la caída del gobierno de Aristide, para evitar que se les juzgara y estamos investigando su paradero”, indicó el encargado. No obstante, manifestó que se ha hecho difícil localizarlas, porque tienen mucho poder y cuentan con una fuerte protección y con un eficiente equipo de inteligencia. “Son una red muy bien organizada a la que no es fácil penetrar, pero las investigaciones están avanzadas”, aseguró, después de precisar que el proceso electoral haitiano provocó un receso en las operaciones conjuntas. “Pero ya se reanudaron y estamos haciendo el trabajo en ambos lados, porque en vista de que muchos de los fugitivos son poderosos jefes de bandas, también pudieran estar escondidos en su país, en lugares de difícil acceso, donde se sentirían más seguros. Algunos optan por irse a otra isla del Caribe”, sustentó. A los prófugos se les imputan fusilamientos, masacres de mujeres y niños y asaltos a mano armada. A esos actos se anexa una lista de 42 individuos que cruzaron la línea limítrofe, algunos de los que podrían estar ocultos en el país. Once son buscados por secuestro, y los otros 31 por ese y otros crímenes, pero se teme que el número sea mayor ya que a muchos se les da seguimiento desde Haití, y no se ha remitido ninguna petición de ayuda internacional. En enero, dos de los maleantes fueron apresados y deportados. Ya antes habían muerto cuatro en enfrentamientos con la policía haitiana, y los cuerpos de seguridad dominicanos lograron detener a varios en allanamientos. Se informó que a los malhechores se les vincula a grupos armados cuyas fechorías tenían por objeto recabar dinero para financiar actividades políticas. Otros casos que se manejan en el país son peticiones referentes a delitos de secuestro, crímenes por encargo y contrabando de vehículos. Expedientes abiertos El jefe del J-2, Rafael Ramírez Ferreira, dijo que en lo que concierne a los plagiarios no hay constancia de que estén aquí, pero que las indagaciones no se han detenido porque los expedientes continúan abiertos. “En las últimas semanas no hemos tenido ninguna noticia sobre ese asunto, hay probabilidades de que no estén aquí, pero seguimos investigando”, expresó. Indicó, que en vista de que los cargos contra los presuntos infractores están vigentes, la búsqueda continuará hasta descartar las sospechas de que se alojan en territorio nacional. Explicó que las indagaciones se inscriben en el marco del acuerdo de cooperación suscrito con la Policía de Haití, hace dos años. |
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